2 Personas
INGREDIENTES:
- 150 ml. de agua
- 225 gr. de harina de fuerza
- 30 gr. de huevos
- 30 gr. de azúcar
- 10 gr. de azúcar invertido
- 3 gr. de levadura de panadería
- una pizca de sal
- 14 gr. de leche en polvo
- 40 gr. de mantequilla a pomada
PARA EL GLASEADO:
- 1 cucharada de zumo de limón
- 2 cucharadas de azúcar glas
PREPARACIÓN:
Precalentamos el horno a 200º C.
Ponemos la harina y el agua en un cazo a fuego medio hasta que alcance unos 65º C. removemos sin parar.
Cuando espese y empiece a separarse de las paredes retiramos del fuego, tapamos con papel film y dejamos enfriar.
Mezclamos la masa que hemos preparado con la harina, la leche en polvo y el azúcar, hacemos un volcán con ello y en el centro vertemos el huevo batido, el agua y el azúcar invertido, removemos en círculos para que la harina se vaya integrando, agrega la levadura amasando para que se integre, luego hacemos lo mismo con la sal.
Colocamos sobre la mesa de trabajo y amasamos hasta conseguir una masa elástica y manejable.
Cuando la masa esté suave y lisa empezamos a echar la mantequilla a punto pomada (temperatura ambiente) no echamos más hasta que no se haya incorporado bien la anterior; la pasta quedará brillante y lisa, aunque un poco pegajosa.
Dejamos levar en un bol impregnado con aceite durante 1 hora hasta que doble su volumen.
Dividimos la masa en dos partes, estiramos en forma rectangular con la ayuda de un rodillo y extendemos una capa de mantequilla a punto pomada cuidadosamente por encima, sin cubrir los bordes.
Mezclamos azúcar moreno con canela en polvo y espolvoreamos la masa con esta mezcla y hacemos un rollo.
Cortamos el rollo en porciones de unos 2 cm. de grosor y colocamos en una bandeja de horno, dejamos que vuelvan a doblar su volumen.
Horneamos durante 12 minutos aproximadamente, hasta que cojan un tono dorado, dejamos que se enfríen sobre una rejilla para que no acumulen humedad.
Elabora un glaseado mezclando el zumo de limón y azúcar glas, seguimos incorporando azúcar hasta que alcance la consistencia de un glaseado.
Cuando los rollos estén fríos los pintamos con el glaseado generosamente