INGREDIENTES:
- 3 l. de leche
- 1 rama de vainilla
- 800 gr. de azúcar
- 1/2 cucharadita de bicarbonato de sodio
PREPARACIÓN:
Si podemos utilizar una cazuela de cobre mejor, pero si no es posible, pues que remedio con otra, echamos en ella la leche, el azúcar y la rama de vainilla.
Ponemos a hervir todos los ingredientes a fuego fuerte, revolviendo hasta que queden disueltos.
Cuando estén disueltos bajamos el fuego al mínimo y añadimos media cuchara pequeña de bicarbonato de sodio y dejamos que continúe hirviendo.
Cuando comienza a espesar, mezclamos continuamente con una cuchara de madera para que no se pegue en el fondo.
A las dos horas de estar sobre el fuego, el dulce de leche tomará color y quedará más espeso.
Como ocurre con varios postres caseros, para conocer si el dulce de leche está a punto, se toma un palillo (o el mango de una cuchara de madera) y se lo sumerge en el dulce. Si al dejar enfriar, el dulce de leche queda pegado y no corre, es que está a punto.
Apagamos el fuego y continuamos revolviendo hasta que enfríe.
Con esta receta podemos preparar otros muchos postres, ya que es una excelente crema de relleno para bizcochos y tartas así como para creps y lo que se nos ocurra en ese momento