Nombre dado a los estambres secos de la flor aromática de un árbol de hoja perenne, típico de Indonesia.
Reciben su nombre del latín clavus, dado que cuando están enteros tienen forma de clavo.
Aunque pueden obtenerse en polvo, es mejor comprarlos enteros y moler el corazón.
El clavo es un ingrediente adecuado para la repostería, las conservas y las bebidas preparadas con especias.
También se usa en tartas de manzana, picadillos de fruta, budín de frutas y nueces, budín de leche, galletas, cazuelas y en mezclas de especias.