Hacer pasta de ajo resulta muy sencillo y facilita
nuestra cocina diaria. La pasta de ajo es mucho más digerible y suave que el ajo
en su estado natural. ¿Cuántas veces llegamos a casa agotados y no tenemos mucho
para cocinar?.
Tal vez tenemos una pasta seca o un par de bifes. Con solo
agregarle un poco de pasta de ajo variaremos el sabor de una forma simple. La
pasta de ajo se puede conservar en la heladera casi 10 días y se puede usar en
vez del ajo en cualquier otra receta, evitando así el retrogusto que a veces
provoca.
Por Alexandra Magariños (Uruguay)
Pelar y sacar la nervadura de una cabeza de ajo
(parte central del diente, a veces de color verde).
Colocar en un mixer o en un procesador los dientes
de ajo pelados, agregar un poco de aceite y licuar hasta formar una pasta. Se
puede hacer con agua, pero es posible que la pasta cambie de color y su duración
sea menor.
Luego colocar la pasta en un recipiente y agregar
gotas de aceite y un poco de sal en la parte superior, tapar y guardar en la
heladera.
Lo mismo podemos hacer con el jengibre para
aquellos que les guste algo más exótico en las comidas, obteniendo una pasta de
jengibre. Con estas dos pastas, a cualquier preparación de último momento le
daremos un toque genial!