INGREDIENTES:
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1 kilo de tomate triturado
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2 pizcas jengibre en polvo
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2 pizcas de clavo molido
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3 pizcas de canela en polvo
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1 dl. de vinagre de vino blanco suave
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1 cucharada de miel
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2 cucharaditas de azúcar morena
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pimienta negra molida
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pimienta de cayena (opcional)
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1 cebolla pequeña
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1 diente de ajo
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sal
PREPARACIÓN:
Cortamos la cebolla en BRUNOISE el diente de ajo lo laminamos.
Junto con el tomate trituramos todo en la batidora, ponemos una cazuela a calentar y añadimos la mezcla anterior.
Cuando esta salsa empiece a espesarse añadimos los ingredientes restantes ( las pizcas algunos las conoceréis mejor por golpes).
Cocemos todo a fuego suave, hasta conseguir un puré de tomate espeso.
Agregamos el vinagre, el azúcar, las especias, ( las pizcas algunos las conoceréis mejor por golpes). salpimentamos, seguimos cocinando a fuego suave hasta que se reduzca a la mitad.
Dejamos enfriar y lo metemos en tarros de cristal con tapa hermética, los metemos en la nevera y duran varios días.
Si lo que queremos es conservarlos más tiempo hervimos los botes durante 30 minutos, seguimos los CONSEJOS DE ENVASADO publicado en esta entrada que os dejo señalada.