Dando vueltas por la red para ver recetas de Navidad, me he encontrado con estas maravillosas galletas de la tienda de marialunarillos.com y no me he podido resistir a traerlas para nuestro blog.
Me parecen estupendas para pasar esta tarde con los niños en la cocina.
Maribel
INGREDIENTES:
- 125 gr. de mantequilla
- 90 gr. de azúcar moreno
- 140 gr. de sirope de arce
- 320 gr. de harina tamizada
- 2 cucharadta de jengibre en polvo
Ponemos en el bol de nuestro robot amasador la mantequilla reblandecida junto con el azúcar moreno y batimos hasta conseguir una consistencia cremosa.
Añadimos el resto de ingredientes y mezclamos hasta obtener una masa homogénea.
Retiramos la masa del bol, hacemos una bola con las manos y la colocamos entre dos papeles de horno y la estiramos con el rodillo. Lo ideal es dejarlas con un grosor de unos 5 o 6 m/m.
Una vez estirada, la dejamos reposar en el frigorífico durante toda la noche.
Al día siguiente, precalentamos el horno a 180ºC. y sacamos la masa estirada del frigorífico, retiramos el papel de horno superior, y con un cortador cortamos las galletas y las pasamos a la bandeja de hornear en la que habremos colocado otro papel de hornear.
Después, con un cortador más pequeño, cortamos y retiramos la parte central. ¡No la tiréis! nos servirán para hacer otro tipo de galletas.
Con un palillo hacemos un agujerito en uno de los extremos de la galleta. El tamaño debe ser suficiente para poder pasar luego el cordón o la cinta para colgar.
En un mortero, picamos un poco los caramelos y los ponemos en el hueco de la galleta.
Horneamos unos 12 minutos, o hasta que veáis que los bordes empiezan a dorarse.
Sacamos las galletas del horno y las dejamos en la misma bandeja hasta que veamos que el caramelo deja de burbujear, entonces, las pasamos a una rejilla y dejamos enfriar por completo.
Mientras se enfrían las galletas, preparamos la glasa real. Si pincháis en el enlace veréis el post que hizo mi compañera Miriam hace unas semanas.
Una vez frías procedemos a su decoración, podéis hacerlo como más os guste, yo opté por una decoración sencilla…
Dejamos secar la glasa y finalmente procedemos a colocar el cordón o cinta para colgarlas en el árbol.
