LAS TRADICIONALES “PIPAS”
Tostar semillas de girasol en casa no es un proceso difícil ni mucho menos, ya que el proceso solo son tres pasos, un poquito de paciencia y “un gran sacrificio” tener que ir probándolas de vez en cuando para ver si están a tu gusto.
Maribel
INGREDIENTES:
- 450 gr.. de semillas de girasol
- 40 gr. de sal fina de mesa
- 30 gr. de sal gruesa
- 1 l. de agua
PREPARACIÓN:
1.-Ponemos las semillas a remojar en el agua a temperatura ambiente durante 8 o 10 horas, pasado ese tiempo colamos y las colocamos sobre un papel de cocina para que absorban el excedente de agua.
2.-Colocamos las semillas sobre la bandeja del horno bien extendidas sin hacer más de una capa para que reciban el calor todas por un igual, horneamos a 150°C de 30 a 40 minutos con el horno previamente precalentado. Observa y mezcla de vez en cuando, “prueba” el nivel de tostado para que estén a tu gusto, notarás el olor cuando empiezan a tostarse.
3.-Saca las semillas del horno y colócalas sobre un paño limpio para que se enfríen, si quieres conservarlas hazlo en tarros de cristal que cierren herméticamente, pero nunca antes de que se enfríen totalmente.
Y nuestras semillas de girasol ya son “pipas”
Para unos aperitivos podemos probar a cambiarles el sabor añadiéndoles algún condimento adicional esto habría que hacerlo antes de hornearlas, como por ejemplo alguna especia picante molida, alguna hierva o incluso un toque dulce como la miel.