Bizcocho de nata y yema, se presenta de forma rectangular, tamaño variable con textura blanda, suave y esponjosa.
Su superficie se presenta de una capa de yema tostada, se elabora desde hace pocos años. La idea de su elaboración, surgió en honor a la patrona de Palencia "La Virgen de La Calle". Desde los primeros momentos ha sido un postre que ha tenido gran aceptación y cuyo consumo se ha generalizado hasta el punto de ser el postre típico del día de Las Candelas.
(Resumen. patrimonio-gastronómico) JUNTA DE CASTILLA Y LEON
Una palentina por matrimonio, dedicado a las primas de mi marido Belén y Consuelo
Maribel
INGREDIENTES:
- biscochos de soletilla
- crema pastelera
- yema pastelera
- jarabe
- 1/2 copita de coñac
- azúcar
- nata montada
Crema pastelera:
- 250 ml leche
- 50 gr azúcar
- 20 gr maicena
- 1 huevo
- 1/2 vaina vainilla
- cáscara de limón
- 1 nuez de mantequilla
yema pastelera
- 150 gr de yema de huevo
- 150 gr de azúcar
- 75 gr de agua
jarabe
- 1 vasito de agua
- 2 vasitos de azúcar
PREPARACIÓN:
Comenzamos preparando el jarabe. Ponemos a hervir el agua con el azúcar hasta que alcance 105º C. y retiramos del fuego, cuando veamos que la temperatura baje a 80º C.
En ese momento vertemos el jarabe sobre las yemas sin dejar de remover con una varilla pasamos la mezcla por el chino y ponemos de nuevo al fuego, batimos con cuidado que no se pegue en los lados, cocemos a temperatura media hasta que tenga la densidad adecuada, retiramos del fuego y vertemos en un recipiente grande para enfriar, removemos de vez en cuando para que no forme telilla en la parte superior.
Mezclamos 375 gr. de crema pastelera con 125 gr. de nata montada y un chorrito de coñac.
Después extendemos una capa fina de la mezcla sobre el fondo de la bandeja y colocamos una capa de bizcochos de soletilla. Con la ayuda de un pincel de cocina empapamos los bizcochos con una mezcla de jarabe y coñac.
Colocamos otra segunda capa de crema y después otra de bizcochos que volvemos a empapar, por último extendemos una capa de yema pastelera y sobre ésta azúcar en grano que quemaremos con la pala caliente.
Por último se forma una cenefa de nata rizada en forma de avellanitas alrededor del postre.